España: Análisis del Mercado de Divisas: 17 de abril.
EURO
El par EURUSD avanzó por cuarta semana consecutiva, llegando a máximos del par desde marzo de 2022.
El euro parece que carece de fuerza propia, y el EUR/USD repuntó por la debilidad del dólar estadounidense. Sin embargo, los datos europeos se ajustaron a las expectativas, proporcionando un ligero apoyo a la moneda común. Las ventas minoristas de la eurozona bajaron un 0.8% en marzo, tal y como se esperaba, mientras que el índice Sentix de confianza de los inversores de abril mejoró hasta -8.7. La producción industrial de la Unión creció a un ritmo anualizado del 2% en febrero, superando las previsiones, mientras que Alemania confirmó el Índice Armonizado de Precios de Consumo (IPCA) en el 7.8% interanual en marzo.
Por su parte, los responsables políticos del Banco Central Europeo mantuvieron su sesgo restrictivo. En una intervención al margen de la reunión del Fondo Monetario Internacional, un miembro del Consejo de Gobierno afirmó que se barajan las opciones de subir los tipos 25 y 50 puntos básicos para la reunión de política monetaria de mayo, mientras que Pierre Wunsch, responsable de política monetaria, lo repitió el viernes. Por otra parte, la presidenta Christine Lagarde afirmó que espera que la inflación en la zona euro siga cayendo y que la presión sobre los precios se desvanezca, en su declaración pronunciada en el evento de primavera del FMI.
Por un lado, el BCE considera que ha completado la mayoría de las subidas de los costes de financiación necesarias para contener la inflación, según el Consejo de Gobierno, pero por otro, la inflación sigue estando más de tres veces por encima del objetivo de comodidad del banco central, en torno al 2%. El BCE también se enfrenta a la presión del sector bancario en medio de un agresivo endurecimiento monetario, lo que deja a los responsables políticos europeos entre la espada y la pared.
DÓLAR
El dólar estadounidense se desploma a mínimos de un año al comienzo de la jornada de negociación del pasado viernes en Europa ante las crecientes expectativas de que unos datos de inflación más fríos de lo esperado provocarán un pronto final del ciclo de ajustes de los tipos de la Reserva Federal.
Estas pérdidas del dólar se producen tras la publicación del informe del índice de precios al productor de marzo de Estados Unidos, que cayó un 0,5% con respecto al mes anterior, su mayor caída desde el inicio de la pandemia.
El IPP se ha ralentizado en términos anuales, subiendo un 2,7% con respecto a hace un año, su menor avance en más de dos años, mientras que el IPP subyacente, del que se excluyen los volátiles componentes de los alimentos y la energía, descendió un 0,1% con respecto a febrero y subió un 3,4% con respecto a hace un año.
Estas cifras se publican justo un día después de que los precios al consumo registraran su menor aumento anual desde mayo de 2021.
Todavía se espera que la Reserva Federal vuelva a subir los tipos de interés el mes que viene, probablemente sólo 25 puntos básicos, pero aumentan las expectativas de que el banco central estadounidense recorte los tipos de interés antes de finalizar el año.
El viernes, el USD rebotó desde estos mínimos del año, después de que algunos componentes de las ventas minoristas de marzo no fueran tan débiles como temían algunos economistas, mientras que una destacada autoridad de la Reserva Federal advirtió que la entidad necesita seguir subiendo tasas de interés para reducir la inflación.
Las ventas minoristas subyacentes, que se corresponden más estrechamente con el componente de gasto del consumidor del Producto Interno Bruto, cayeron un 0,3% el mes pasado. Sin embargo, a pesar de la caída de marzo, las ganancias de enero y febrero encaminaron firmemente el gasto de los consumidores para acelerarse en el primer trimestre.
El gobernador de la Fed, Christopher Waller, dijo el viernes que, a pesar de un año de agresivas alzas de tasas, las autoridades monetarias "no han avanzado mucho" en el retorno de la inflación a su objetivo del 2% y necesitan elevar aún más los tipos.
LIBRA
La fortaleza de la libra esterlina está reflejando menos malas noticias que realmente buenas noticias, señalan los analistas de MUFG Bank. Esta semana los datos del Reino Unido (inflación y empleo) serán clave para el Banco de Inglaterra.
Aunque la libra se ha comportado bien este año, los datos de la semana pasada pueden haber lastrado el rendimiento a corto plazo. Se publicaron datos peor de lo esperado, como el PIB mensual.
La libra es la tercera divisa del G10 que peor evolución tuvo la semana pasada y los datos del jueves parece ser que están pesando un poco sobre la GBP. El par EUR/GBP ha subido un 0.7% esta semana y la mayor parte de esa subida fue desde el jueves.
Un conjunto de datos débiles esta semana que cambie las expectativas sobre una subida de tasas del Banco de Inglaterra el 11 de mayo bien podría socavar el rendimiento de la GBP, pero es más probable que sea evidente frente al EUR que frente al resto del G10, dado que muchos bancos centrales ya han pasado a una pausa y la curva en los EE.UU. apunta a recortes agresivos a finales de año.
El calendario económico para esta semana es;